Hace algunas fechas fuimos invitados al VII Congreso Nacional de Enoturismo que tuvo lugar en la Escuela Internacional de Negocios Aliter en Madrid los días 30 y 31 de Mayo. En estas jornadas sobre el vino y turismo compartimos experiencias con diferentes expertos en materia de enoturismo y comunicación.
Aprendimos que la gastronomía y el vino van de la mano, no se pueden concebir la una sin la otra. De este modo, el vino es esencial en la gastronomía y esta en el turismo actual.
Por ello se destacó la importancia del papel de la gastronomía dentro del turismo, puesto que este es el factor más valorado por el turista que nos vista y asimismo clave para el crecimiento del sector como se ha observado en los últimos tiempos. El turismo y la gastronomía se conocen como la Industria de la Felicidad, por lo que no es de extrañar que la gastronomía se haya declarado Bien de Interés Cultural.
El enoturismo es una motivación pero no por sí sola, necesita de la gastronomía y otros componentes para darse a conocer. Así destacamos la importancia de los bodegueros como productores de estos exquisitos caldos que cada vez interesan más a nuestros visitantes, y como el enoturismo es una parte de ello.
Las bodegas cada vez más invierten en el espacio como se ve en aquellas que en los últimos años se han puesto en manos de los mejores arquitectos para construir sus sedes. Además tiene un potencial indiscutible en el desarrollo local de la zona puesto que acerca al visitante a lugares donde antes no se daban flujos de turismo y conecta a la población local con los visitantes. Por otro lado, es una herramienta de promoción de los productos y tiene su lado didáctico tanto para el curioso como para el experto que se ve motivado a experimentar el enoturismo.
Todo ello, es la suma de factores que hacen decidir al turista por un destino puesto que el vino por si solo no es suficiente. Por todos es sabido que nos gusta compartir las experiencias y vivencias vacacionales, por ello es clave el papel de la comunicación. No sólo porque nuestros visitantes hablan de nuestras ofertas y productos en las redes sociales sino también cómo desde las bodegas se comunica al turista.
Así los profesionales de este sector emergente deben ser innovadores y creativos en el discurso, necesitan impulsar la creación de sinergias con otros agentes en destino, adaptarse al entorno, diversificar las actividades, personalizar el discurso a los visitantes y sobre todo la necesidad de coordinación entre las administraciones públicas, patronatos de turismo y bodegas.